Ella vive en el,
En el palacio de la risa y el dolor,
Y me hace señas porque yo la estoy mirando,
Y no tengo a donde ir.
Se que me dira,
Que estaba sola porque nunca me encontró,
Y porque ella ha besado a la muerte,
Con los labios del corazón.
Ese pobre corazón, que se muere por vivir,
Las cosas que hace, se manda con todo a todo
Siempre le fue al riesgo fiel y ha tratado sin razón
De poderla convencer, que no trate de pensar
Que la acepte como es, que por eso la eligió
Quien fuera su gran mentor,
Lo ha dotado con el filo aquel
Que sangra las venas del amor
El, el que te ha sabido desbocar,
A vos, que lo llevas con tanta fiebre en la piel,
Vos, que cargas sus penas por error.
Y yo ya vivo en él, en el palacio de la risa y el dolor,
Y te hago señas porque yo te estoy mirando,
Y no tenes donde ir.
Te voy a decir, que estaba solo porque nunca te encontré,
Y porque yo también he besado a la muerte,
Con los labios del corazón.
Ese pobre corazón, que se muere por vivir,
Las cosas que hace, se manda con todo a todo
Siempre le fue al riesgo fiel y a tratado sin razón
De poderla convencer, que no trate de pensar
Que la acepte como es, que por eso la eligió
Quien fuera su gran mentor,
Lo ha dotado con el filo aquel
Que sangra las venas del amor
El, el que te ha sabido desbocar,
A vos, que lo llevas con tanta fiebre en la piel,
Vos, que cargas sus penas por error.
Ese pobre corazón, que se muere por vivir,
Las cosas que hace, se manda con todo a todo
Siempre le fue al riesgo fiel y a tratado sin razón
De poderla convencer, que no trate de pensar
Que la acepte como es, que por eso la eligió
Quien fuera su gran mentor,
Lo ha dotado con el filo aquel
Que sangra las venas del amor
El, el que te ha sabido desbocar,
A vos, que lo llevas con tanta fiebre en la piel,
Vos, que cargas sus penas por error.
